En el año 476 el bárbaro Odoacro pone fin al Imperio Romano en
Occidente, un imperio que llevaba unos 150 años asumiendo la cultura
cristiana, y así toda la civilización romana parece hundirse. Europa se
deshacía en territorios mal conectados y empobrecidos bajo reyezuelos
bárbaros en guerras continuadas. Fue entonces cuando San Benito (480-547 d.C) empezó a fundar monasterios: comunidades que conservaran la cultura y la fe y pudieran irradiarla e influir alrededor.
A eso se refiere la propuesta del escrito Rod Dreher en su libro de 2017 "The Benedict Option": la opción de San Benito es salir de un cuerpo social enfermizo creando comunidades intencionales,
sanas, fuertes, pequeñas, pero influyentes. Y eso encaja con un tema
que Benedicto XVI trató varias veces, deseando comunidades quizá más
pequeñas pero más relevantes.
Rod Dreher y su libro "La opción Benedicto"
Este fue el tema que trató este 11 de septiembre en Roma el
secretario de Benedicto XVI, Georg Gänswein, arzobispo y Prefecto de la
Casa Pontificia, presentando la edición italiana del libro de Rod
Dreher.
"Si la Iglesia no sabe renovarse..."
“Debo confesar honestamente que percibo esta época de gran crisis,
que hoy ya no se le esconde a nadie, sobre todo como un tiempo de
gracia, porque al final no habrá nada en especial que nos libere, sino
solo la Verdad como el Señor nos ha asegurado”, explicó Gänswein.
“Si la Iglesia no sabe cómo renovarse nuevamente en este tiempo
con la ayuda de Dios, entonces todo el proyecto de la civilización está
en peligro una vez más”, añadió el secretario de Benedicto XVI.
Comentó que el libro de Dreher sobre "la opción Benedicto" o "la
opción San Benito" es una “maravillosa inspiración en muchos aspectos”,
un texto que “en las últimas semanas me ha dado mucho consuelo”.
La crisis de los abusos, un 11S de la Iglesia
Gänswein se refirió especialmente a la crisis por la ineficacia en la
prevención y respuesta adecuada a los abusos sexuales y lo comparó con un 11S satánico, una catástrofe traumática para la Iglesia similar al atentado que destruyó las Torres Gemelas de Nueva York y dejó un reguero de víctimas.
“Para muchos puede parecer que la Iglesia de Jesús nunca podrá
recuperarse de la catástrofe de su pecado, porque parece devorada por
ella”, continuó. Sin embargo, precisó, la Iglesia está viva; y “ni siquiera el satánico 11S de la Iglesia Católica Universal puede debilitar o destruir esta verdad, el origen de su fundación por el Señor Resucitado y Victorioso”.
Recordó que en el Santuario Nacional de la Inmaculada Concepción en
Washington el Papa Benedicto XVI habló de la “profunda vergüenza”
causada “por el abuso sexual a menores por parte de sacerdotes”. Un
lamento “que no logró contener el mal y ni siquiera las garantías
formales y los compromisos verbales de una gran parte de la jerarquía”.
El ecumenismo del huir de Dios
Después el arzobispo lamentó el “ecumenismo del no creer y de la
huida en común de Dios y de la Iglesia en todas las denominaciones. Un
ecumenismo del eclipse de Dios en general”. “Pero este eclipse de Dios no significa que Dios ya no exista, sino que muchos ya no lo reconocen, porque las sombras se han interpuesto ante el Señor.
Hoy las sombras de los pecados de las transgresiones y los crímenes
dentro de la Iglesia han oscurecido para muchos su brillante presencia”.
Se da la circunstancia de que el mismo Rod Dreher, autor del libro, declara que su fe ha sido tocada por los escándalos de inoperancia ante los abusos. Educado en una familia metodista, se convirtió al catolicismo en 1993. En 2002 empezó a cubrir como periodista y analista los casos de abusos sexuales en entidades católicas y después unos años, abatido
ante lo que había aprendido con detalle, en 2006 anunció que dejaba la
Iglesia Católica y se integraba en una iglesia ortodoxa oriental.
Desde ella intenta animar a todos los cristianos de distintas iglesias
de doctrina tradicional a colaborar en esta "opción San Benito".
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