El arzobispo de Santiago de Compostela, monseñor Julián Barrio, indica a los periodistas que cuentan “con mi oración y mi agradecimiento”. En una carta pastoral dirigida a los profesionales de la información con motivo de la festividad de San Francisco de Sales, patrono de los periodistas, el arzobispo compostelano señala que ”la libertad parece ser el gran desafío que la comunicación social debe afrontar para conquistar espacios de suficiente autonomía donde no infundir jamás la duda y no sembrar la confusión”. Monseñor Barrio recuerda a los periodistas que “nuestra sociedad necesita ser regenerada racional, moral y espiritualmente. Hay que leer en clave positiva los signos de los tiempos y descubrir todo lo bueno y constructivo que el progreso nos ofrece para ponerlo al servicio de la humanidad, a pesar de las sombras que con demasiada frecuencia lo esconden a nuestros ojos”. En su carta, el arzobispo de Santiago dice a los periodistas que “la actitud de servicio al bien común debe ser la máxima al realizar vuestra tarea”.
“El día 24 de este mes recordáis a vuestro Patrono, San Francisco de Sales”, señala en su carta pastoral a los periodistas monseñor Barrio, “cuyos escritos reflejan amabilidad, finura de espíritu, respeto y cordialidad. Supo dar al humanismo naturalista y con frecuencia paganizante un rostro cristiano, creando un humanismo devoto y optimista que será denominado “humanismo de la esperanza”. El arzobispo compostelano afirma que “la misión periodística ha de ser un servicio a la verdad integral del hombre. Sois alfareros de la palabra que venís de un dolor y vais a otro, que nacéis en un río propio y desembocáis en el mar de la humanidad. Y esto exige competencia profesional, responsabilidad y amor a la verdad que garantizan la objetividad, el pluralismo y la libertad, valores que avalan el periodismo como servicio a la sociedad”.
Adjuntamos texto íntegro de la carta pastoral de monseñor Julián Barrio.
Pastoral en la festividad del Patrono de los Periodistas 2016
Servicio a la verdad integral del hombre
Luz y vida, verdad y alegría han de ser referentes en una existencia humanizada y humanizadora. El día 24 de este mes recordáis a vuestro Patrono, San Francisco de Sales, cuyos escritos reflejan amabilidad, finura de espíritu, respeto y cordialidad. Supo dar al humanismo naturalista y con frecuencia paganizante un rostro cristiano, creando un humanismo devoto y optimista que será denominado “humanismo de la esperanza”.
En vuestro peregrinar vais dejando las huellas del pensamiento y de la palabra en este fenómeno cultural global, sintiéndoos comprometidos a transmitir la verdad, piedra angular de la sociedad de información. La misión periodística ha de ser un servicio a la verdad integral del hombre. Sois alfareros de la palabra que venís de un dolor y vais a otro, que nacéis en un río propio y desembocáis en el mar de la humanidad. Y esto exige competencia profesional, responsabilidad y amor a la verdad que garantizan la objetividad, el pluralismo y la libertad, valores que avalan el periodismo como servicio a la sociedad. “Si es difícil una objetividad completa y total, no lo es la lucha por dar con la verdad, la decisión de proponer la verdad, la praxis de no manipular la verdad, la actitud de ser incorruptibles ante la verdad”. Esta debe ser la fuente y el criterio de la libertad también en la información. “El que considera verdadero lo que es falso no es libre; el que afirma lo falso, manteniéndolo como verdadero, no es leal: y se puede faltar al respeto a la verdad tanto diciendo positivamente lo que es falso, como diciendo sólo una parte de la verdad, callando intencionadamente la otra”.
La esencia de la comunicación no es la comunicación misma, sino la presencia de un rostro y de una voz, de una palabra y de una escucha. “En la palabra humana habita el hombre. Ella es su morada”. A medida que progresa la organización técnica del mundo moderno, la verdad va cayendo cada vez más infaliblemente en el terreno de la organización, de sus medios y de sus métodos, y, por lo mismo, el conformismo se convierte en regla universal tanto para los cristianos como para los demás. Y así vemos como va desapareciendo a ritmo acelerado la raza de los espíritus libres. “La independencia es una isla rocosa sin playas”. La libertad parece ser el gran desafío que la comunicación social debe afrontar para conquistar espacios de suficiente autonomía donde no infundir jamás la duda y no sembrar la confusión. Nuestra sociedad necesita ser regenerada racional, moral y espiritualmente. Hay que leer en clave positiva los signos de los tiempos y descubrir todo lo bueno y constructivo que el progreso nos ofrece para ponerlo al servicio de la humanidad, a pesar de las sombras que con demasiada frecuencia lo esconden a nuestros ojos. La actitud de servicio al bien común debe ser la máxima al realizar vuestra tarea. Contad con mi oración y agradecimiento.
+ Julián Barrio Barrio,
Arzobispo de Santiago de Compostela.
Adjuntamos texto íntegro de la carta pastoral de monseñor Julián Barrio.
Pastoral en la festividad del Patrono de los Periodistas 2016
Servicio a la verdad integral del hombre
Luz y vida, verdad y alegría han de ser referentes en una existencia humanizada y humanizadora. El día 24 de este mes recordáis a vuestro Patrono, San Francisco de Sales, cuyos escritos reflejan amabilidad, finura de espíritu, respeto y cordialidad. Supo dar al humanismo naturalista y con frecuencia paganizante un rostro cristiano, creando un humanismo devoto y optimista que será denominado “humanismo de la esperanza”.
En vuestro peregrinar vais dejando las huellas del pensamiento y de la palabra en este fenómeno cultural global, sintiéndoos comprometidos a transmitir la verdad, piedra angular de la sociedad de información. La misión periodística ha de ser un servicio a la verdad integral del hombre. Sois alfareros de la palabra que venís de un dolor y vais a otro, que nacéis en un río propio y desembocáis en el mar de la humanidad. Y esto exige competencia profesional, responsabilidad y amor a la verdad que garantizan la objetividad, el pluralismo y la libertad, valores que avalan el periodismo como servicio a la sociedad. “Si es difícil una objetividad completa y total, no lo es la lucha por dar con la verdad, la decisión de proponer la verdad, la praxis de no manipular la verdad, la actitud de ser incorruptibles ante la verdad”. Esta debe ser la fuente y el criterio de la libertad también en la información. “El que considera verdadero lo que es falso no es libre; el que afirma lo falso, manteniéndolo como verdadero, no es leal: y se puede faltar al respeto a la verdad tanto diciendo positivamente lo que es falso, como diciendo sólo una parte de la verdad, callando intencionadamente la otra”.
La esencia de la comunicación no es la comunicación misma, sino la presencia de un rostro y de una voz, de una palabra y de una escucha. “En la palabra humana habita el hombre. Ella es su morada”. A medida que progresa la organización técnica del mundo moderno, la verdad va cayendo cada vez más infaliblemente en el terreno de la organización, de sus medios y de sus métodos, y, por lo mismo, el conformismo se convierte en regla universal tanto para los cristianos como para los demás. Y así vemos como va desapareciendo a ritmo acelerado la raza de los espíritus libres. “La independencia es una isla rocosa sin playas”. La libertad parece ser el gran desafío que la comunicación social debe afrontar para conquistar espacios de suficiente autonomía donde no infundir jamás la duda y no sembrar la confusión. Nuestra sociedad necesita ser regenerada racional, moral y espiritualmente. Hay que leer en clave positiva los signos de los tiempos y descubrir todo lo bueno y constructivo que el progreso nos ofrece para ponerlo al servicio de la humanidad, a pesar de las sombras que con demasiada frecuencia lo esconden a nuestros ojos. La actitud de servicio al bien común debe ser la máxima al realizar vuestra tarea. Contad con mi oración y agradecimiento.
+ Julián Barrio Barrio,
Arzobispo de Santiago de Compostela.
AgenciaSIC