En la Cripta de la Catedral de Santiago, donde yacen los restos del Apóstol Santiago, Patrón de España y destino de miles de peregrinos, se celebraba este pasado lunes, a las 13:00 horas, una Eucaristía. Estuvo presidida por el Arzobispo Castrense Mons. Juan del Río, y fue una celebración llena de mística y de fe, en un lugar santo que cimienta desde la presencia de los restos del Apóstol Santiago la Catedral y el mismo Camino de peregrinación desde sus inicios hasta este tercer milenio. Y también conmemorativa, pues durante su celebración se evocó el XXV Aniversario del Servicio de Asistencia Religiosa de las Fuerzas Armadas (SARFAS), que exactamente se festejaba ese día.La Santa Misa fue concelebrada por el Delegado del AMI en España Don Juan José Rascón. Debido al espacio reducido de la cripta asistieron solamente los tres seminaristas del Arzobispado castrense Don Santiago González, Don José Rafael Sánchez y Don Francisco Javier Boada, que tuvieron la oportunidad de estar cerca de los restos del Apóstol.
También se distribuyó la comunión a los peregrinos presentes en la tumba. Una celebración muy hermosa con la compañía espiritual del Apóstol, en la que se rogó por las Fuerzas Armadas, la Guardia Civil y los Cuerpos de Seguridad del Estado, además de por el Arzobispado, que celebraba en ese día el XXV aniversario de la Creación del Servicio de Asistencia Religiosa de las Fuerzas Armadas (SARFAS).
Después en la sacristía se hizo constar en el Libro de Visitas la efeméride rubricada por el Arzobisp Mons. Juan del Río.
