Este Jueves Santo, el Papa lavó los pies a doce personas con discapacidad del centro Santa María de la Providencia de Roma, de la Fundación Don Carlo Gnocchi.
Se trata de un centro para personas con discapacidad grave y para pacientes con diversas dolencias.
Tenían edades comprendidas entre los 16 y los 86 años. Entre ellos había cuatro mujeres y un hombre de religión musulmana.
En su homilía, el Papa explicó que este gesto sirve para que los cristianos recuerden que deben servirse los unos a los otros.