La capacidad de sacrificio del ser humano es irracional e
inconmesurable. Mildred Lisette Norman (1908-1981) caminó sola durante
más de 28 años para divulgar un único y utópico mensaje serigrafiado en
su camiseta azul: paz. 28 años cruzando Estados Unidos de un extremo a
otro. Adoptó el nombre de “Peace Pilgrim”. Su familia, carpintero el
padre y ama de casa su madre, resolvieron la situación de escasez
material en la que vivían con un derroche de ética y moral sin
precedentes. Una noche de soledad, siendo adulta, paseaba por un bosque
cercano a su casa, buscando respuestas a su vida invertida en cuidar a
su desgraciada pareja, y tuvo una “iluminación”: “Caminando en la
madrugada me sentía elevada, más elevada que nunca. …cada flor, cada
arbusto, cada árbol, parecía llevar una aureola. En ese momento de
soledad me sentí en plena disposición, sin reservas, a dar mi vida, a
dedicar mi vida al servicio. Entonces, una gran paz vino sobre mí. Una
sensación de paz que intenté provocar el resto de mi vida. Experimenté
una plena capacitación a dar todos mis esfuerzos, más allá de los
triviales cuidados de mi coche”.
Nunca se detuvo en su vida, que finaliza atropellada en un
desgraciado accidente de tráfico a sus 73 años, cuando recorría Estados
Unidos por séptima vez. Algún día habrá que salir de casa y continuar
viviendo.
Padre Roberto
pastoralsantiago.es