“La cuaresma es una llamada”, explicó hoy en su homilía del Miércoles de Ceniza, en la iglesia de Salomé, el arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio. ” Con esta conciencia hemos de salir de nosotros mismos para no encerrarnos en nuestro bucle egocéntrico ni vivir una vida de mínimos, y para dejarnos preguntar por Dios”, indicó el arzobispo.
Monseñor Barrio señaló además que en este tiempo “se nos pide dar una respuesta desde la fe y desde el Evangelio a los niños a los que se les impide vivir una infancia digna, a los jóvenes que no encuentran sentido a su vida, a los adultos que vagan en la indiferencia, a las familias que se resquebrajan, a los ancianos que gastan el atardecer de su vida ayunos de esperanza”.
Al inicio de este tiempo litúrgico que culminará en la Semana Santa y el Domingo de Pascua, el arzobispo dirigirá sendos retiros mañana día 7 y el viernes 8 en las vicarías de Santiago y A Coruña, respectivamente. Hoy por la mañana, el azobispo presidió un retiro sacerdotal con imposición de la ceniza en la Vicaría de Pontevedra. También el obispo auxiliar, monseñor Jesús Fernández, se desplazó a distintas parroquias de A Coruña para presidir la ceremonia.