San Bartolomé, apóstol
Uno de los doce apóstoles de Jesús a quien generalmente se identifica con Natanael. Patrono de varias ciudades europeas, protector de enfermedades de piel y nerviosas
Fiesta de san Bartolomé, apóstol, a quien generalmente se identifica con Natanael. Nacido en Caná de Galilea, fue presentado por Felipe a Cristo Jesús en las cercanías del Jordán, donde el Señor le invitó a seguirle, agregándolo a los Doce.
Uno de los doce apóstoles de Jesús a quien generalmente se identifica con Natanael. Patrono de varias ciudades europeas, protector de enfermedades de piel y nerviosas
Fiesta de san Bartolomé, apóstol, a quien generalmente se identifica con Natanael. Nacido en Caná de Galilea, fue presentado por Felipe a Cristo Jesús en las cercanías del Jordán, donde el Señor le invitó a seguirle, agregándolo a los Doce.
Después de la Ascensión del Señor, es tradición que predicó el Evangelio en la India y que allí fue coronado con el martirio.
Patronazgo: patrono de varias ciudades europeas, de los mineros,
albañiles, agricultores, viticultores, pastores, trabajadores del cuero,
curtidores, talabarteros, zapateros, sastres, panaderos, carniceros, y
comerciantes del aceite y el queso (en Florencia); protector contra las
enfermedades de la piel y nerviosas.
A este santo (que fue uno de los doce apóstoles de Jesús) lo pintaban
los antiguos con la piel en sus brazos como quien lleva un abrigo,
porque la tradición cuenta que su martirio consistió en que le
arrancaron la piel de su cuerpo, estando él aún vivo.
Parece que Bartolomé es un sobrenombre o segundo nombre que le fue
añadido a su antiguo nombre que era Natanael (que significa "regalo de
Dios").
Muchos autores creen que el personaje que el evangelista san Juan
llama Natanael, es el mismo que otros evangelistas llaman Bartolomé.
Porque san Mateo, san Lucas y san Marcos cuando nombran al apóstol
Felipe, le colocan como compañero de Felipe a Natanael.
El evangelio de san Juan la narra de la siguiente manera: "Jesús se
encontró a Felipe y le dijo: "Sígueme". Felipe se encontró a Natanael y
le dijo: "Hemos encontrado a aquél a quien anunciaron Moisés y los
profetas.
Es Jesús de Nazaret". Natanael le respondió: " ¿Es que de Nazaret
puede salir algo bueno?" Felipe le dijo: "Ven y verás". Vio Jesús que
se acercaba Natanael y dijo de él: "Ahí tienen a un israelita de
verdad, en quien no hay engaño".
Natanael le preguntó: "¿Desde cuando me conoces?" Le respondió Jesús:
"antes de que Felipe te llamara, cuando tú estabas allá debajo del
árbol, yo te vi".
Le respondió Natanael: "Maestro, Tú eres el Hijo de Dios, Tú eres el
Rey de Israel". Jesús le contestó: "Por haber dicho que te vi debajo del
árbol, ¿crees? Te aseguró que verás a los ángeles del cielo bajar y
subir alrededor del Hijo del Hombre." (Jn. 1,43 )-
Desde entonces nuestro santo fue un discípulo incondicional de este
enviado de Dios, Cristo Jesús que tenía poderes y sabiduría del todo
sobrenaturales.
Con los otros 11 apóstoles presenció los admirables milagros de
Jesús, oyó sus sublimes enseñanzas y recibió el Espíritu Santo en forma
de lenguas de fuego.
Para san Bartolomé, como para nosotros, la santidad no se basa en
hacer milagros, ni en deslumbrar a otros con hazañas extraordinarias,
sino en dedicar la vida a amar a Dios, a hacer conocer y amar mas a
Jesucristo, y a propagar su santa religión, y en tener una constante
caridad con los demás y tratar de hacer a todos el mayor bien posible.
Oración
Fortalece Señor, nuestra fe, para que nos adhiramos a Cristo, tu
Hijo, con la misma sinceridad con que lo hizo el apóstol san Bartolomé, y
haz que, por la intercesión de este santo, sea siempre tu Iglesia
sacramento de salvación universal para todos los hombres. Por nuestro
Señor Jesucristo, tu Hijo.
Artículo originalmente publicado por evangeliodeldia.org
Aleteia