San Juan Fisher, obispo, y santo Tomás Moro, por oponerse al rey
Enrique VIII en la controversia sobre su matrimonio y sobre la primacía
del Papa, fueron encarcelados en la Torre de Londres, en Inglaterra.
Juan Fisher, obispo de Rochester, conocido por su erudición y por la
dignidad de su vida, por mandato del rey fue decapitado este día frente a
la cárcel.
Tomás Moro, padre de familia de vida integérrima y presidente del
consejo real, por mantenerse fiel a la Iglesia católica murió el día 6
de julio, uniéndose así al martirio del obispo.
Juan Fisher nació el año 1469; fue hijo de un modesto mercero de Beberly, en el condado de York (Inglaterra).
Estudió teología en Canbridge, fue ordenado sacerdote, por privilegio
cuando solo contaba veintidós años, y a los treinta y cinco ya era
vicecanciller de la Universidad.
Consumado humanista, fundó los Colleges de Cristo y de san Juan,
amplió bibliotecas y fundó cátedras con la ayuda de Lady Margaret, madre
de Enrique VII. Erasmo llegó a afirmar que no había en el país "hombre
más culto, ni obispo más santo".
Fue nombrado obispo de Rochester en el año 1504, cargo que ejerció
con una vida llena de austeridad y de entrega pastoral, visitando con
frecuencia a los fieles de su grey. Se mostró como decidido apologista
antiprotestante.
Mantuvo una postura firme y clara ante los proyectos de
Enrique VIII sobre su anulación matrimonial, defendiendo la validez y la
indisolubilidad del contraído con la reina Catalina de Aragón.
Miembro de la Cámara de los Lores, arremete contra ciertas medidas
anticlericales y hace añadir una cláusula fatalmente restrictiva al
nombramiento de Enrique VIII como Cabeza de la Iglesia en Inglaterra.
Su actitud le llevó a estar dos veces en la cárcel, a sufrir atentados e intentos de asesinato y a soportar bajas calumnias.
Por su negativa a prestar el juramento de Supremacía, se le encarceló
en la Torre de Londres, le despojaron de su título episcopal y
declararon a Rochester "sede vacante".
Tomás Moro nació el año 1477, y completó sus
estudios en Oxford; se casó y tuvo un hijo y tres hijas. Ocupó el cargo
de Canciller del reino.
Íntimo compañero y amigo personal del rey Enrique VIII, abogado
distinguido, notable humanista de gran cultura, amigo de Erasmo,
cariñoso padre de familia, caballero simpático por su buen humor y,
además católico fervoroso.
Cuando vio que era incompatible con su religión el juramento de
sumisión a Enrique como cabeza de la Iglesia en Inglaterra, presentó su
dimisión, intentando vivir una vida tranquila con su familia, sin más
complicaciones.
Pero fue apresado y metido en la Torre de Londres. A todos los
esfuerzos de sus amigos para convencerle de que debía prestar su
juramento contestó sencillamente que no podía reconciliarlo con su conciencia.
Cuando su propia mujer le insiste a hacerlo por lo que ella juzgaba
que era bien para su casa, le contestó: "¿Cuántos años crees que podría
vivir en mi casa?". "Por lo menos veinte, porque no eres viejo", le dijo
ella. "Muy mala ganga, puesto que quieres que cambie por veinte años
toda la eternidad".
Escribió varias obras sobre el arte de gobernar y en defensa de la religión.
Ambos, por haberse opuesto al rey Enrique VIII en la cuestión de su
pretendida anulación de matrimonio, fueron decapitados el año 1535: Juan
Fisher el día 22 de Junio, Tomás Moro el día 6 de Julio, después de
quince meses de cárcel donde escribió Diálogo en tiempo de tribulación.
El obispo Juan Fisher, mientras estaba en la cárcel, fue designado cardenal por el papa Pablo III.
Oración
Señor, tú que has querido que el martirio sea el supremo testimonio
de la fe, concédenos, por la intercesión de los santos Juan Fisher y
Tomás Moro, ratificar con nuestra vida la fe que profesamos con nuestros
labios. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo.
Artículo originalmente publicado por evangeliodeldia.org
Aleteia