“Le agradezco tanto por esta visita, y confío en la paz”, dijo el papa Francisco a Hassan Rouhani, presidente de la República Islámica de Irán durante la audiencia privada que tuvo lugar este martes 26 de enero en el Vaticano.

Rouhani sorprendió al pedir al Papa de rezar por él, saludo que acostumbra usar el Pontífice al final de sus audiencias, encuentros y visitas pastorales.

El encuentro duró 40 minutos en la Biblioteca del Palacio Apostólico del Vaticano. En la mesa del ‘encuentro, la ‘libertad religiosa’ y la ‘promoción de la dignidad’, según informó la Sala de Prensa del Vaticano.

Sucesivamente, “se han evidenciado los comunes valores espirituales y se ha hecho referencia al buen estado de las relaciones” entre la Santa Sede y la República Islámica.
La República islámica ha mantenido relaciones diplomáticas con el Vaticano incluso después de la revolución de 1979.

La situación de la comunidad cristiana, minoría en el país islámico, hizo también parte de la agenda y una de las prioridades diplomáticas manifiestas del Papa y de la Santa Sede.

Entretanto, se habló del reciente acuerdo nuclear firmado por Irán con las potencias de Occidente, la paz en Oriente Medio y poner fin al “terrorismo y el tráfico de armas”.

“Al respecto, se recordó la importancia del diálogo interreligioso y la responsabilidad de las comunidades religiosas en la promoción de la reconciliación, de la tolerancia y de la paz”, informó el Vaticano.

Rouhani con el típico turbante blanco y un vestido largo con corte de túnica estuvo acompañado por un séquito de 12 personas, y una mujer, la única del grupo, que sirvió como interprete.

Durante el tradicional intercambio de los regalos, el Papa le entregó al mandatario iraní la medalla de San Martín. Y le explicó que se trataba de un Santo que se quita la manta para darla a un pobre, lo cual “es un signo de fraternidad gratuita”.

“Gracias de verdad”, recambió Rouhani. Por su parte, le entregó al Papa un tapete persa de un metro por ochenta. “Ha sido hecho a mano en la Ciudad de Qom”. Además de un libro de pintura tradicional iraní con miniaturas representativas de la vida del pueblo.

Asimismo, el Pontífice regaló al presidente la encíclica Laudato Sí sobre la protección de la Creación. “Esta es una copia en inglés, pero me permito de darle una traducción en árabe, al no tener una traducción en fârsí”.

“Le pido el favor de rezar por mí, me ha dado de verdad mucho gusto y le deseo un buen trabajo”, fue el saludo final de presidente iraní al Papa en idioma persa (fârsí), luego traducido al italiano por la interprete.

El último presidente iraní recibido en audiencia por el Papa fue Mohammed Khatami, quien en 1999 se reunió con el entonces Pontífice Juan Pablo II.

El presidente después ha visitado al Secretario de Estado, Pietro Parolin y al vice de las relaciones diplomáticas vaticanas, mons. Paul Gallagher, asimismo estuvo acompañado por el ministro de Exteriores, Mohamad Yavad Zarif y el clérigo islámico y embajador de Irán ante la Santa Sede, Mohammed Taher Rabbani

El presidente iraní ha hablado de tolerancia religiosa al intervenir esta mañana en una rueda de negocios entre Italia – Irán antes de su visita al Vaticano.

“El Corán invita a los musulmanes a proteger primero que nada las iglesias y las sinagogas: esto significa tolerancia”, confirmó.

Rouhani además visitó oficialmente al premier italiano Mateo Renzi en el Campidoglio de Roma. “Estoy contento que el presidente Rouhani haya elegido de iniciar en Italia la misión que trae de nuevo a Irán al escenario europeo, después de muchos años”, dijo Renzi.

La visita de Rouhani que había sido aplazada debido a los atentados en París del 13 de noviembre 2015, finalmente se realizó, ahora le espera una etapa en Francia, donde encontrará a su homologo, francés, François Hollande.
Aleteia

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