- Carta Pastoral del arzobispo, en la que recuerda que el compromiso cristiano debe servir para denunciar “la injusticia” y transformar “personas y estructuras”

“Hemos de ser un signo de vida, abriendo horizontes de esperanza,
construyendo en la bondad y en el amor, y superando los prejuicios que
siempre nos distancian. Hagamos de nuestra vida un trampolín que nos
lance a anunciar la Buena Noticia del Evangelio, teniendo siempre
presentes a los pobres”. Así se expresa en una Carta Pastoral en el Día
del Corpus Christi, este próximo domingo, el arzobispo de Compostela,
monseñor Julián Barrio. La Iglesia en España hace coincidir con esta
solemnidad el Día de la Caridad, que tiene su rostro referente en
Cáritas. El arzobispo de Santiago recuerda que “este año Caritas nos
propone como lema: “Pon en marcha tu compromiso para mejorar el mundo”,
invitándonos a salir al encuentro de los demás si queremos que germine
la fraternidad, y a tratar de dar cabida a los otros no sólo en nuestra
mente sino sobre todo en nuestro corazón, conscientes de que cuando
vivimos generosamente siempre recibimos más de lo que damos”.
Monseñor Julián Barrio afirma también que “el medio más eficaz de
llevar a cabo esta tarea en el ámbito social es, en primer lugar, el
testimonio de nuestra vida, sin olvidar el anuncio explícito del
Jesucristo. Hablamos de Dios cuando nuestro compromiso hunde sus raíces
en la entraña de nuestro Dios y es fuente de fraternidad; cuando nos
hace fijarnos los unos en los otros y cargar los unos con los otros”.
El arzobispo indica, igualmente, que debemos “descubrir el rostro de
Dios en el rostro de todo ser humano”, buscando “su desarrollo
integral”. Y comenta que hablamos de Dios cuando nuestro compromiso como
cristianos “denuncia la injusticia y es transformador de las personas y
de las estructuras; cuando en una cultura del éxito y de la
rentabilidad apuesta por los débiles, los frágiles, los últimos; cuando
se vive como don y ayuda a superar la lógica del mercado con la lógica
del don y de la gratuidad”.