- “El Día diocesano de las personas con discapacidad nos ayudará, por tanto, a entrar de manera determinante en esta dinámica del Adviento”.

El arzobispo de Santiago, mons. Julián Barrio, acaba de publicar una
carta pastoral con motivo de celebrarse, este próximo domingo 2 de
diciembre, el Día Internacional de las Personas con Discapacidad. La
jornada coincide con el primer domingo de Adviento, lo que refuerza la
llamada de atención que se nos hace para que seamos, cada día más, una
Iglesia de acogida, siempre atenta a los más necesitados, que son los
favoritos de Dios.
El lema escogido este año es “Que todos seamos diferentes es de lo
más normal”. Con él se quiere incidir en “que la normalidad de la vida
se encuentra en la diversidad y la diferencia. La discapacidad es un
factor de diversidad y pluralidad, y por lo tanto, de enriquecimiento
para la Iglesia”, afirma el arzobispo en su carta. “Lo normal y
ordinario en la Iglesia y también en la sociedad sería tener presente,
acoger y darles el lugar que les corresponde a las personas con
discapacidad, pues todavía son muchas las barreras que se lo impiden”.
Mons. Barrio recuerda que sin los hermanos más frágiles a la Iglesia
le faltarían precisamente los primeros en la consideración de Jesús,
“que siempre se preocupó de los más pequeños, de los últimos, de los que
más necesitados y desfavorecidos”.