El martes 2 de febrero, festividad de la Presentación del Señor, se celebra la Jornada Mundial de la Vida Consagrada con el lema, “La vida consagrada, profecía de la misericordia”. Ese mismo se clausura el Año de la Vida Consagrada.
San Juan Pablo II celebró la primera Jornada Mundial de la Vida Consagrada en el año 1997 y, desde entonces, la Madre Iglesia, cada dos de febrero, pone en el candelero de la gratitud y de la oración a todos aquellos cristianos que han sido llamados a una vida de especial consagración.
Este año de la Vida Consagrada que comenzó el 30 de noviembre, se ha vivido de una manera muy fecunda en todas las diócesis españolas. En concreto en Madrid el 3 y 4 de octubre se celebró el Encuentro de la Vida Consagrada con 1500 participantes.
San Juan Pablo II celebró la primera Jornada Mundial de la Vida Consagrada en el año 1997 y, desde entonces, la Madre Iglesia, cada dos de febrero, pone en el candelero de la gratitud y de la oración a todos aquellos cristianos que han sido llamados a una vida de especial consagración.
Este año de la Vida Consagrada que comenzó el 30 de noviembre, se ha vivido de una manera muy fecunda en todas las diócesis españolas. En concreto en Madrid el 3 y 4 de octubre se celebró el Encuentro de la Vida Consagrada con 1500 participantes.
AgenciaSIC