La terrible amenaza del terrorismo encuentra un antídoto que todo lo puede: la oración.
Presente en numerosos países azotados por la violencia y los atentados, la guerra y la persecución, la fundación Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN) invita a realizar “lo mejor que los cristianos podemos hacer para ayudar a estas víctimas: recemos por cada uno de los fallecidos, por los que permanecen más o menos graves, por tantos familiares desolados detrás de cada fallecido, de cada herido… Pidamos también a Dios por la conversión de los que odian y utilizan la violencia. El mal nunca tendrá la última palabra”.
Presente en numerosos países azotados por la violencia y los atentados, la guerra y la persecución, la fundación Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN) invita a realizar “lo mejor que los cristianos podemos hacer para ayudar a estas víctimas: recemos por cada uno de los fallecidos, por los que permanecen más o menos graves, por tantos familiares desolados detrás de cada fallecido, de cada herido… Pidamos también a Dios por la conversión de los que odian y utilizan la violencia. El mal nunca tendrá la última palabra”.
AIN ha generado una propuesta multinacional e intensa: encender una vela virtual por las víctimas del atentado y rezar esta oración:
Dios todopoderoso y eterno,
de infinita misericordia y bondad,
con el corazón apesadumbrado, acudimos a Ti.
Escucha nuestra oración, ten misericordia de nosotros,
atiende las súplicas de quienes te invocan
en esta hora de tribulación y de prueba.
Te pedimos, Dios de la vida,
por las víctimas mortales del ataque terrorista.
Son hijos tuyos; son hermanos nuestros.
Nunca debían haber muerto en estas circunstancias.
Padre nuestro, acógelos en tu seno.
Atiende nuestra oración, Dios de la salud,
por los heridos de esta masacre.
Sana sus heridas, fortalece sus corazones,
llénalos de tu gracia y de tu paz.
Visita, Dios consolador, a los familiares de las víctimas.
Reviste con tu manto de misericordia y de amor
las llagas de su corazón y de su alma.
Te pedimos por la conversión
de los que odian y utilizan la violencia.
Príncipe de la Paz, Señor Crucificado, Jesucristo Resucitado, compadécete de nosotros, intercede por nosotros.
Santa María, Madre de Dios y Madre nuestra,
Salud de los enfermos, consoladora de los afligidos,
reina de la Paz y de la familias. Ruega por nosotros.
Amén
Decenas de capillas ardientes se abrieron en las parroquias de los barrios afectados por los ataques en París; a la vez que la Iglesia católica celebró misas este fin de semana en toda Francia por las víctimas, sus familias y por la paz en la nación.
Miles de creyentes han estado llegando a las iglesias para colocar flores y velas, y orar por las víctimas.
Las campanas de las iglesias en todas las diócesis de Francia repicaron en señal de duelo y esperanza la noche del domingo. En la catedral de Nuestra Señora de París, el cardenal André Vingt-Trois celebró una misa de réquiem y por la paz y unidad. Los obispos y otros líderes religiosos emitieron llamadas a orar en toda Francia.
Lo mismo hicieron musulmanes de Francia quienes también se suman a la oración. En este sentido, las federaciones musulmanas emitieron el sábado un comunicado conjunto denunciando los ataques terroristas, a la vez que llamaron a que “todas las mezquitas en Francia y todos los fieles eleven oraciones por la paz en nuestro país y la seguridad de nuestros ciudadanos”
Aleteia
