El arzobispo compostelano asegura que se trata de un “acontecimiento singular” y destaca la importancia de sus figuras en la reciente historia de la Iglesia
Monseñor Barrio explica, además, que “como pastor de esta diócesis de Santiago participaré en este acontecimiento de la Iglesia universal. Es una ocasión más para reforzar los vínculos de unidad en la caridad y de comunión con el Sucesor de Pedro. Asistir a la canonización de Juan XXIII y de Juan Pablo II es una manifestación de la cercanía de nuestra Iglesia local a la Sede de Pedro y un agradecimiento cordial a todo cuanto hicieron estos dos amados Papas por la difusión del fenómeno de la peregrinación a Compostela como imagen de la vida del cristiano siempre en camino hacia la ciudadanía de los santos”.
“La Iglesia”, asegura monseñor Barrio, “nos los propone como ejemplos o como modelo pensando que sus vidas se orientaron siempre a Dios, aplicando su sabiduría a la fe”.