
Algunos signos de vida parroquial en tiempo de coronavirus:
– El párroco, Andrés Trinquete, celebra la Eucaristía a diario
encomendando a sus feligreses y a los más afectados por la pandemia.
– Comunicación con los distintos grupos parroquiales, con los jóvenes
de la catequesis, con los integrantes del coro juvenil, etc., velando
especialmente por los enfermos y los que viven solos.
– Cáritas: más de 100 familias que siguen recibiendo atención
primaria. Un grupo de unos 10 voluntarios se encarga de organizar el
reparto de alimentos con las medidas sanitarias de precaución. Durante
estos días se ha llevado a cabo un convenio de ayuda con el ayuntamiento
y se han recibido donativos de algunas empresas locales en lo que
respecta a alimentos y a material sanitario para los usuarios de la
institución eclesial. Poco antes de la alarma sanitaria, la entidad
recibía un útil regalo: una furgoneta de segunda mano para el reparto a
los más necesitados.
– Diversas personas del entorno parroquial han colaborado con la
Delegación de Medios, aportando su testimonio desde su confinamiento
domiciliario.
pastoralsantiago.es
Foto: Miguel Castaño