En las últimas semanas Daniel, Javier, Álvaro y Francisco José han recibido el Orden Sacerdotal en la Diócesis de Cartagena. Yu Yang Cheng, compañero de curso de los cuatro neo presbíteros, se ordenará más adelante en su tierra natal.
Yu Yang Cheng nació en China, hace 27 años, en el seno de una familia
cristiana. “Mi familia era católica, la fe para ellos era importante,
de hecho, mi abuelo estuvo en la cárcel diez años por ser cristiano”, explica el futuro sacerdote haciendo referencia a la persecución que viven los cristianos en China.
Una peculiar vocación
“Mi vocación surgió de un modo peculiar, por aquel entonces había un
sacerdote en mi parroquia que al salir de misa nos daba regalos a los
niños. Un día me preguntó si yo quería ser sacerdote y respondí que sí,
porque pensaba que así podría tener más regalos. Lo curioso es que, en realidad, de alguna manera así fue, porque aquello fue la semilla que Dios puso en mi corazón”.
A medida que fue creciendo aquella “semilla”, aumentó su deseo de
servir a Dios. Por ese motivo, cuando cumplió 18 años, decidió ingresar
en el seminario. “Entré en el seminario de Filipinas en 2010, porque el seminario de China estaba cerrado, allí estuve cuatro años y en 2015 vine a Murcia”.
En la Diócesis de Cartagena continuó sus estudios en el Seminario
Redemptoris Mater de Murcia donde acaba de terminar su formación que
–según dice– le ha ayudado mucho no sólo en su fe sino también en su
desarrollo personal: “Vivir con mis hermanos de distintas nacionalidades me ha ayudado a conocerme a mí mismo y me ha hecho comprender que existe otra manera de vivir y de amar”.
"Ser pastor es dar la vida por otros"
Su pastoral como diácono la ha realizado en la Parroquia de Santa
Eulalia de Murcia, donde ha aprendido la importancia de estar en
comunión no sólo con la Iglesia sino también con los fieles y,
sobretodo, que “ser pastor es dar la vida por otros”, algo que para Cheng es muy importante.
“Siento que perder la vida por los demás es la misión que Dios me ha dado.
Lógicamente yo no tengo ese espíritu innato, pero si Dios me ha elegido
como su servidor Él me dará su Espíritu para que yo pueda realizar mi
tarea”.
Yu Yang Cheng ha regresado ya a China, donde se ordenará presbítero
para servir en su Iglesia local. “Si fuera por mí, me quedaría aquí en
Murcia porque aquí tengo mis amigos, mis hermanos y mi comunidad que me
han ayudado mucho a vivir la fe y a ser quien soy, pero lo importante no soy yo, sino mi misión, y si la Iglesia me envía a China es porque Dios quiere que le sirva allí. Por eso sé que allí podré encontrarme con el Señor”.
Al contrario que el resto de sus compañeros diáconos, que se han
ordenado presbíteros en las últimas semanas, Cheng no sabe cuál será la
fecha de su ordenación, sin embargo, no es algo que le preocupe en
exceso porque confía en que tendrá lugar con arreglo a la voluntad de
Dios. “No me preocupa mi ordenación. Es cierto que yo no tengo la
fecha, pero el Señor la tiene, y si Él la sabe yo puedo estar tranquilo y
contento”.
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