Siria es una ciudad destruida y donde los niños son las principales víctimas de la guerra. El papa Francisco ha enviado de visita a Alepo al secretario delegado del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, Giampietro Dal Toso, del 18 al 23 de enero.Toso estuvo acompañado por el cardenal Mario Zenari, nuncio apostólico en el país, y por el consejero de la nunciatura, Thomas Habib. Se trata de la primera visita oficial por parte de representantes de la Santa Sede después del final de las hostilidades en esta localidad, informó la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
La delegación ha visitado las comunidades cristianas y sus pastores, que han podido expresar gratitud al Papa por su constante preocupación hacia Siria.
Además, se ha encontrado con los representantes de las instituciones de caridad católicas y con algunos grupos de refugiados. En particular, se ha inaugurado un centro de asistencia humanitaria gestionada por Caritas Alepo en el barrio de Hanano.
Los enviados del Papa han participado en un momento de oración ecuménico organizado con motivo de la Semana de oración por la unidad de los cristianos.
Igualmente se verificaron “las condiciones de algunas estructuras hospitalarias católicas, a la luz de un futuro proyecto”.
También hubo encuentros con representantes del islam, “durante los cuales se subrayó la responsabilidad de las religiones en el educar a la paz y a la reconciliación”.
Las autoridades civiles y religiosas han agasajado a la delegación, manifestando especial gratitud por el gesto del Papa de elevar a la dignidad cardenalicia al representante pontificio en el país. A su vez, se ha reconocido en él la especial cercanía del Papa a la golpeada población siria.
La Santa Sede informó que los encuentros de la delegación sirvieron además para verificar sobre el terreno la caridad católica y continuar trabajando para intensificar en el futuro la ayuda hacia la población más necesitada, incluso con la contribución de la comunidad internacional.
Alojamiento, asistencia sanitaria, vestido, alimentación, educación, se cuentan entre las urgencias inmediatas de las población.
Además, se ha encontrado con los representantes de las instituciones de caridad católicas y con algunos grupos de refugiados. En particular, se ha inaugurado un centro de asistencia humanitaria gestionada por Caritas Alepo en el barrio de Hanano.
Los enviados del Papa han participado en un momento de oración ecuménico organizado con motivo de la Semana de oración por la unidad de los cristianos.
Igualmente se verificaron “las condiciones de algunas estructuras hospitalarias católicas, a la luz de un futuro proyecto”.
También hubo encuentros con representantes del islam, “durante los cuales se subrayó la responsabilidad de las religiones en el educar a la paz y a la reconciliación”.
Las autoridades civiles y religiosas han agasajado a la delegación, manifestando especial gratitud por el gesto del Papa de elevar a la dignidad cardenalicia al representante pontificio en el país. A su vez, se ha reconocido en él la especial cercanía del Papa a la golpeada población siria.
La Santa Sede informó que los encuentros de la delegación sirvieron además para verificar sobre el terreno la caridad católica y continuar trabajando para intensificar en el futuro la ayuda hacia la población más necesitada, incluso con la contribución de la comunidad internacional.
Alojamiento, asistencia sanitaria, vestido, alimentación, educación, se cuentan entre las urgencias inmediatas de las población.
Aleteia
